CARAMBOLA
Jubilación y re invención en la incipiente democracia…
La incipiente democracia se refleja en las redes: los votantes partidarios son de hueso colorado y duros son los comentarios. Se lee el sesgo: se resisten al resultado, alientan la inercia y –un poco- el miedo. Los contrarios están igual a ellos, no hay punto medio pues todos creen tener la razón. Muchos de sus comentarios y mensajes virtuales caen en lo antagónico, la sinrazón por oposición. El reto está aquí, en el respeto a la individualidad donde surge la argumentación y se configuran las ideas divergentes; todo en cauce pues, en la búsqueda de configurar un bien común que se torna complicado.
Y ahora, ¿qué hacer con el nuevo escenario? pareciera que el inconsciente se resiste, por casi nueve décadas en Colima los gobernadores emanan del PRI por designación y, también, por simuladas elecciones internas, pues la duda de la democratización de los procesos partidarios siempre estuvo ahí. Y la duda es una constante: en la repartición de justicia, en la legalidad, en el logro de un puesto, en la capacidad, en la normalidad, en la transparencia, en todo-todo. A tal grado que el Frente Juvenil que enarbolaba y aglutinaba a los jóvenes con sueños reivindicativos en el estado de Colima desapareció. O más bien, los jóvenes de la década de los sesenta se eternizó, ahí están los funcionarios: arrugando el futuro. No se quieren jubilar. Los chavorrucos de la política estatal se recontratan una y otra vez, no dejan que se re oxigene y reinvente la juventud del PRI, pues los obligan a nacer dinosaurios.
Contrario al PRI, el PAN en Colima integró por lo menos dos generaciones de rostros jóvenes, los cuales han ocupado en la función pública presidencias municipales, diputaciones locales, diputaciones federales y senadurías, dando la oportunidad de renovación a las filas de acción nacional. Lo que el PAN deberá implementar en lo inmediato y tras los resultados de las elecciones de este primero de julio de 2018, es un nuevo enfoque y tratamiento en su política interna, y en la función pública. De mantener liderazgos que se enquisten en el poder operando al mero estilo jurásico, condenarán el futuro promisorio de Acción Nacional. Los resultados electorales fueron claros: la opacidad, impunidad y corrupción asquearon y deprimieron a las mayorías, bajo un régimen político limitado, que se configuró más bien facistoide en un país rico lleno de pobres.
Mantener la percepción del PRIAN en esta nueva etapa en que el INE legitimó su permanencia y valía institucional, sería para Acción Nacional asumir la análoga política en un mundo digital con nuevas generaciones.
“El asteroide mató a los dinosaurios”. Entonces sería grave que los funcionarios públicos que emanan de MORENA, PT y Encuentro Social nazcan o emerjan jubilados y jurásicos. Es imperativo que se reinventen en la gobernanza, y no asuman actitudes y decisiones en una red de relaciones que comprometan su libertad de ejercer un gobierno práctico en resultados. Cuidado con sus fobias, rencores y limitaciones, de no ejercer una gobernanza democrática –igualitaria–, la población será en esta ocasión dura, incisiva, pues ya sabe que su voto cuenta, pesa y pega. Sobre todo por la alta expectativa que se espera en los resultados de los votados. Si no cumplen serán prematuros botados. El reto es mayúsculo pues costará improvisar en el arranque.
Honorable sería que se jubilaran los chavorrucos de la política y se reinventaran los que anteceden. Claro está que los votantes no quieren ni una pizca de sal, a menos que sea con un bote de chela con limón, esbozando la fresca sonrisa que da la incipiente democratización.
Éste es el momento del arranque… ¿Dónde estamos colocados? ¿Los chavorrucos dejarán reverdecer las tierras colimenses con tanta agua? o ¿Se recontratarán una vez más hasta que el cuerpo seque? Esperemos que la política de los botados no se haga reuma y mucho menos tumor… Los votos los jubilaron y los colimenses también
